Veintidós años han pasado desde que un 19 de marzo, fiesta grande en su pueblo, Vicente Soler Lázaro ascendiera de grado. Su gente hizo un alto en las celebraciones josefinas y, en masa, acudió a la plaza de toros de Castelló. El cartel ha ganado enteros con el paso de los años: Ortega Cano ejercía por entonces su magisterio y un novel, un tal José Tomás, estaba haciendo méritos por alcanzar la cima.
El doctorado iba a ser en principio el 2 de marzo, día de la Magdalena, pero la huelga convocada por la Confederación de Asociaciones Profesionales Taurinas (CAPT) dio, provisionalmente, al traste con las ilusiones.'Almonteño' se llamó el de la ceremonia y mientras el padrino se iba por la puerta grande tras cortar dos orejas, testigo y alternativado se marcharon por la de cuadrillas con una.
El objetauro es obra de Cros Estrems y se confeccionó expresamente para los festejos que por aquel entonces se daban fuera de feria. Mide 97 x 54 cms. y lo imprimió Litografía Ortega.
